Adolfo Hitler y Eva Braun: entre la obsesión y devoción

Adolf Hitler y Eva Braun 

Se vieron por primera vez en 1927, aunque su relación comenzó tiempo después, ese encuentro fue muy significativo para ambos, se impactaron mutuamente, al punto que Eva le escribió a su hermana Gretl Braun, describiendo el suceso.

Todo lo que sabemos de ese día se debe a esa carta, Eva describió a Adolf como un hombre maduro con un gracioso bigote, además relató que ella estaba subida en una escalera para alcanzar un archivo, así que él pudo admirar sus piernas. Eva era una muchacha atractiva, rubia y atlética, tenía apenas 17 años y él 40. Quedaron prendados uno del otro. Sin embargo, en un principio, sólo se trataba de encuentros casuales que él planeaba para verla.

Unos dos años más tarde comenzó esta relación, signada por la obsesión de ambos. Se sabe que en el primer encuentro romántico ella le juró lealtad total y estar con él hasta el final. Se amaban intensamente, pero Hitler estaba entregado a la política y se alejaba de ella por periodos largos.
Eva Braun intentó suicidarse dos veces, con la clara intención de que él se acercara a ella. Una vez se dio un disparo con una pistola y en la otra ingirió una cantidad importante de pastillas. Esta manipulación le resultó muy bien, Adolfo cedió, le dedicó más tiempo y estableció comodidades adicionales para ella.



La historia de Adolfo y Eva fue una relación con muchos elementos, todos intensos, que han inspirado muchos escritos y quizás, la más célebre sea Eva Braun película de Simone Cafidi, donde se muestra la mezcla de poder, amor y devoción que marcó la vida de esta mujer.

Adolfo Hitler cultivaba una imagen de héroe casto, además pensaba que su atractivo sexual era un arma política importante, por lo tanto, no quería casarse. Ella aceptó esa condición, lo que no soportaba era su falta de atención. La solución fue que Eva se unió al equipo de Heinrich Hoffman, quien era el fotógrafo oficial del partido Nazi, así podía acompañar al grupo, y a Adolfo, a todos los viajes oficiales. Con esto aumentaron las oportunidades para pasar la noche juntos y, en general, compartir tiempo, que era lo que ella reclamaba. Hoffman era el dueño de la oficina donde se conocieron Adolfo y Eva, en aquel primer encuentro a los pies de la escalera.

Muchos se preguntan si Eva Braun tuvo hijos, la respuesta es que oficialmente no. De hecho, hay datos que apuntan que Eva tuvo una condición médica que le impedía gestar un embarazo. Pero también existen fuertes rumores acerca de que tuvo un hijo de Hitler nacido en 1938, aunque esto nunca ha sido confirmado. Lo cierto es que ellos no necesitaron descendencia para adorarse, se amaban con intensidad. Los allegados al Führer sabían que Eva era intocable, incluso, la media hermana de Hitler fue despedida de su equipo por adversarla.

Catorce años después de su promesa, Eva la cumplió. Estaba terminando la guerra, era inminente el fracaso de los nazis, Adolfo estaba acorralado en Berlín, pasaba casi todo su tiempo en el bunker. Eva se trasladó hasta allá, directo al peligro, sin importarle las consecuencias y sin intentar salvarse ella. En la madrugada del 29 de abril de 1945, ocurrió la boda de Eva Braun con Adolf Hitler. Fue muy sencilla, solo asistieron dos testigos y duró apenas unos minutos. Esta fue la coronación de este amor marcado por los tropiezos, escondido, clandestino, del cual solo se supo después de la muerte de ambos y que tuvo un final trágico e impactante.